Fiesta en el barco
El barco que recorrió Tallinn-> Estocolmo tardó unas 17 horas y nos costó la cama unos 38,5 euros (o 154 euros el camarote de 4 ), zarpó a las 18h y llegó a las 10h15 del día siguiente.
El barco consta de fast food, varios restaurantes, super mercado (agua medio litro 1.5 euro , paté de alce que compré 3.5 euros) , una sala de video juegos, 2 salas de fiesta con música y espectáculos y hasta de una discoteca.
En el super mercado se puede encontrar precios muy buenos, en especial en lo que se refiere el alcohol, hay ofertas bastante buenas por ejemplo Vodka de un litro por 11 euros (los suecos son los que más gastan).
Ví un espectáculo de circo, grupos que cantan mientras la tripulación baila en la pista , me tomé una coca cola por 2.5 euros en la barra. Cambiamos de salas para escuchar otro tipo de música y la fiesta acabó en la discoteca.
Cambiamos 50 euros, nos dieron el cambio a 9,0248 , o sea 451 coronas (KR)
Estocolmo
Tomar el metro es caro, un billete sencillo cuesta unas 44 KR en taquilla, 36 en máquina y si disponemos de la tarjeta azul (que hay que comprar) unas 25 KR el viaje.
Encontramos un hostal por 23 euros la noche, nos quedamos 2 noches.
Salimos a pasear, entramos en la iglesia de Santa Clara cerca de la estación, una iglesia bastante bonita y muy alta.
Entramos por la calle más concurrida y comercial de la ciudad Drottninggatan donde a la vuelta comí un kebab+bebida por 50 Kr.
Nos dirigimos hacia la puerta de entrada que nos conduce a través el parlamento situado en una isla pequeña antes de cruzar un segundo puente y llegar en el barrio Gamla Stan.
Gamla Stan
Es una isla y el centro histórico de la ciudad, unas cuantas calles turísticas, tiendas de souvenirs, iglesias y sobre todo el palacio real.
Palacio Real
Riddarholmen
Desde Gamla Stan podemos cruzar hacia otra isla aún más pequeña llamada Riddarholmen. Paseando había edificios antiguos relacionados con la justicia o la burocracia y una iglesia altísima muy bonita, la riddarholmenskyrkan.
El otro atractivo son sus vistas al mar y en especial a la torre del Stockholms Stadshus, el ayuntamiento desde donde celebran los premios nobel. Una torre muy alta e impresionante.
A la vuelta para ahorrar algo de dinero fuimos a comprar en un supermercado comida para cenar , lo típico son las albóndigas suecas, un paquete cuesta entorno a las 15 KR.
Ya por la noche un paseo por la zona de clubs y de bares , la calle kungsgatan, los clubs cuestan de media unos 150 KR la entrada y cierra tarde, los bares cierran a las 2 de la mañana. Obviamente no consusimos nada por lo caro que nos resulta pero en el 7/11 2 botellines de fanta nos salió en oferta por 30 KR.
Djurgarden
Al día siguiente quisimos ir a la isla donde se encuentra el famoso museo Vasa y que cuesta unos 135 KR.
Otros 25 KR de metro + ferry para llegar a dicha isla ya que no hay metro directo.
Ese museo contiene un barco del siglo 17 en perfecto estado ya que se hundió nada más ponerse a flote por su exceso de peso debido a que el rey de la época quiso añadir demasiados cañones. Pero no entramos, demasiado caro como todo.
El otro museo famoso de la zona es el de ABBA, unos 210 KR, tampoco entramos pero nos sacamos unas fotos, se podría pillar un pase de Estocolmo según el número de días y que incluye todos los museos y transportes que quisieramos visitar . El precio se encuentra por internet y como lo podéis imaginar … caro.
Dimos un paseo por la isla que esta vez sí que es grande.
Luego fuimos caminando por el paseo marítimo de nuevo hacia el centro, paseando por el puerto deportivo y llegando a unas plazas y parques interesantes, el Berzelii Park y el Kungstradgarden con feria medieval incluida.
Un último tour por Gamlan Stan y de vuelta al hostal viendo Estocolmo de noche.
Un menú Burger King. 55 KR, a medio día por la ciudad se puede encontrar precios más razonables incluso en el burger king o macDonalds.
El Bus al aeropuerto de skavsta cuesta 159 KR, por internet 135 KR. Tarda 1h20 en llegar y sale de la estación de ferrocarriles donde por cierto, los souvenirs salen más baratos que en el centro ciudad.
Tercer país del viaje, de nuevo un inglés perfecto y una belleza femenina a cortar el aliento.